viernes, 31 de marzo de 2017

Colonia Popotla

Historia de la colonia Popotla

Cercano al poblado ribereño de Tlacopan, Popotla se conoció por ser una zona boscosa, principalmente sembrada por tulares (bosque de ahuehuetes). Durante la conquista, fue en este lugar en donde la tradición cuenta que Hernán Cortés, al salir de la ciudad de Tenochtitlán con sus tropas por la Calzada México-Tacuba y observar la derrota sufrida por su ejército a manos del de los aztecas tras una batalla librada en el palacio de Axayácatl -la llamada Matanza de Tóxcatl-, se detuvo a lamentar tal suceso en uno de éstos centenarios árboles ubicado al borde de la calzada. Dicho árbol es el que sus restos todavía se conservan protegidos por una pequeña barda de herrería; a tal hecho acontecido se le conoció tiempo después como la Noche triste. Al lado de éste sitio se levantó una pequeña ermita para conmemorar la derrota de aquella noche, la cual también se mantiene en pie.
Durante el periodo virreinal, la zona se caracterizó por ser productora de hortalizas para la ciudad, templos como San Antonio y Merced de las huertas llevan en su nombre esta actividad.1 Popotla se conformó como pequeño poblado de unos cuantos caseríos hasta finales del siglo XIX y comienzos del siglo XX, siendo en este último periodo cuando a lo largo de la entonces calzada México Tacuba se empiezan a levantar grandes casas de estilo inglés (victoriano) y francés o porfiriano, las cuales son ocupadas como villas de campo o quintas de veraneo por algunas familias acomodadas de la capital, dadas las cercanías del lugar a los pueblos de la entonces Villa Azcapotzalco y Tacuba. Algunas casas de éste tipo también se levantaron sobre la Avenida Mar Mediterráneo y no pocas sobre la calle de Mar Egeo.


Colonia Roma

Historia de la colonia Roma

El área que actualmente ocupa fue lo que se conoció hasta fines del siglo XIX como los Potreros de la Romita, ubicados al poniente de lo que era la Hacienda de la Romita, localizada en aquel entonces a orillas de la Ciudad de México y teniendo su origen en un barrio de Tenochtitlan llamado Aztacalco. Aquellos potreros fueron fraccionados por la Compañía de Terrenos de la Calzada de Chapultepec, S.A., cuyo accionista principal era Walter Orrin, que aparte de ser conocido por sus ideas para mejorar y renovar la Ciudad de México, era dueño de un circo famoso en el país por esos años, en el cual actuaba el célebre payaso inglés Richard Bell, que pertenecía al prestigioso Jockey Club y formaba parte de lo más destacado en la alta sociedad porfiriana. Desde aquel entonces y hasta ahora, los nombres que llevan las calles de la colonia son los de las ciudades mexicanas que el Circo Orrin visitó durante sus recorridos por el interior del país, decidiendo nombrar las calles con los nombres de los lugares en donde más aplausos recibió.
Pensada para convertirse el barrio de la clase alta, la Colonia Roma fue diseñada con bulevares y amplios camellones (la avenida Álvaro Obregón es un ejemplo de un boulevard al estilo de los de París: grandes camellones con doble hilera de árboles y anchas avenidas), esquinas a 45 grados por las cuales pasaban los carruajes (que ya empezaban a caer en desuso) y terrenos amplios, que permitieron trasplantar la idea anglosajona del chalet con mansardas, lucarnas y chimenea rodeado del jardín, a la inversa del modelo de construcción tradicional español.[4] Las casas de la Colonia Roma, aparte de haber sido grandes y ostentosas, tenían diferentes estilos arquitectónicos que iban desde el art decó hasta el extremo clásico (un ejemplo muy claro es la comparación que existe entre las farolas de la avenida Álvaro Obregón, las cuales son estilo art nouveau y las fuentes de dicha avenida, las cuales tienen estatuas con representaciones griegas y romanas).


Colonia del Valle

Historia de la Colonia del Valle

En el Siglo XX se inició el fraccionamiento de los ranchos donde antes se cultivaba; su nombre era Colonia Americana. Entre estos ranchos los más conocidos eran los de Amores, Tlacoquemécatl, Santa Anita y San Borja. Algunas calles de la colonia llevan el nombre de éstos antiguos ranchos y los frutos que daban sus árboles. A pesar de que funcionaba un tranvía cuya ruta era de la Ciudad de México a Coyoacán, tuvo un lento desarrollo hasta 1920, cuando se amplió y pavimentó la Avenida de los Insurgentes y se empezó a construir enormes casonas sobre la mencionada avenida, lo que marcaría el desarrollo de la zona, a lo cual se le sumó la construcción de monumentos y áreas verdes, una de ellas se ubica en lo que ahora es, el Parque Hundido. Para la década de 1960, la zona ya estaba urbanizada y muchas otras colonias de igual poder adquisitivo yacían a los lados por lo que fue inevitable el desarrollo comercial, destacándose dos importantes acontecimientos, la apertura de Liverpool Insurgentes en 1962 ubicado sobre Insurgentes Sur y calle Parroquia, hoy en día el lujoso centro comercial Galerías Insurgentes, Col. Del Valle Sur, y el primer supermercado del país en 1969 en Av. Universidad y Parroquia. En 1978 la decisión de construir los ejes viales transformó radicalmente, y en forma definitiva, la fisonomía de la colonia, sus antes tranquilas calles con camellón se modificaron y dieron paso al río de asfalto, los ejes 4, 5, 6, 7 y 8 sur la cruzan de oriente a poniente y el 1, 2 y 3 poniente lo hacen de sur a norte. Lo anterior dio por resultado que muchas familias buscaran lugares más tranquilos para vivir y comenzó el inexorable proceso de reciclaje de terrenos, ahí donde hubo mansiones se construyeron edificios de apartamentos o en su defecto se convertían en oficinas, restaurantes, boutiques y escuelas. Desde finales de la década de 1990, se construyen en la zona enormes edificios, principalmente sobre la Avenida de los Insurgentes; y de departamentos para las clases alta y media alta en toda la zona.
Su céntrica ubicación y el hecho de que quedan al alcance todos los servicios, la hacen una colonia para la clase media alta y alta, lo que ha fomentado la construcción de más edificios de departamentos, pero de sus antiguas mansiones y aire residencial aún quedan tramos. Su imán comercial abarca amplias zonas de Miguel Hidalgo, Benito Juárez, Cuauhtemoc, Coyoacan y Álvaro Obregón.